Escándalo en la Policía Nacional: Revelaciones sobre la Influencia de “Papá Pitufo” y la Corrupción Interna.
Una reciente investigación ha sacudido a la Policía Nacional tras la filtración de un audio en el que el exjefe de Interpol en Colombia, coronel Mario Durán, admite la incapacidad del Estado para actuar contra Diego Marín, alias «Papá Pitufo», señalado como el zar del contrabando en el país.
La grabación, revelada por Noticias Caracol, expone una presunta red de corrupción dentro de la Policía y la Fiscalía, que habría protegido a Marín durante décadas, permitiéndole operar con total impunidad. Según la investigación, altos mandos filtraban información clave a la organización criminal, comprometiendo el trabajo de agentes infiltrados y forzando al exilio a varios uniformados, incluido el patrullero Wilmar Alejandro Burbano.
El caso adquiere una dimensión crítica debido a la aparente interferencia en el proceso de investigación. En la grabación, el coronel Durán expresa su impotencia frente al poder de «Papá Pitufo» y reconoce que ciertos sectores de la institución evitaron que el caso llegara a la imputación. «Había intereses dentro de la misma Policía que impedían que esto se llevara a cabo», se escucha decir al oficial.
Uno de los episodios más alarmantes se produjo cuando el patrullero Burbano, quien trabajaba en la investigación, recibió una orden de traslado a la Guajira, una zona controlada por la organización criminal de Marín. Ante la inminente amenaza, el uniformado solicitó su retiro de la institución y huyó del país luego de recibir amenazas.
El escándalo cobra aún mayor relevancia tras revelaciones que vinculan a «Papá Pitufo» con figuras políticas y supuestos lazos con grupos internacionales como Hezbolá. La filtración del audio refuerza las sospechas de que la red de corrupción dentro de las instituciones colombianas ha permitido que estructuras criminales sigan operando sin consecuencias judiciales.
El presidente Gustavo Petro ha manifestado su disposición de apoyar una investigación a fondo para desmantelar la infiltración del crimen en el Estado. «Estoy listo para que se destruya toda la corrupción dentro del Gobierno, no importa quién caiga», declaró el mandatario.
Este nuevo episodio pone en jaque la credibilidad de las instituciones encargadas de garantizar la seguridad y el cumplimiento de la ley en Colombia, aumentando la presión sobre las autoridades para esclarecer los hechos y sancionar a los responsables.
